Entró a robar a dos viviendas y ahora le decretaron la prisión preventiva
El sujeto había sido detenido gracias a pericias realizadas sobre huellas dactilares.
Los jueces que integran la Cámara Penal Departamental de Azul confirmaron la prisión preventiva de un olavarriense que está siendo investigado por dos robos ocurridos en abril y septiembre de este año. Este sujeto pudo ser detenido gracias a pericias realizadas sobre huellas dactilares.
El encausado se llama Matías Ezequiel Juárez y lo acusan de los delitos de Robo agravado por su comisión con efracción y escalamiento y Robo simple, todo de acuerdo con lo que establecen los arts. 55, 164, 167 inc. 3 y 167 inc.4, en relación con el art. 163 inc. 4 del Código Penal.
El Juez Pedro Damián Cini, integrante de la Cámara Penal, al ratificar la prisión preventiva sostuvo: «tanto la gravedad del delito imputado como el monto de pena en expectativa constituyen parámetros válidos, en los términos del art. 148 del CPP, como para presumir la concurrencia de un peligro procesal de elusión del proceso.»
Cini, en otro párrafo del resolutorio, señaló: «no debe perderse de vista que sobre Matías Ezequiel Juárez recae una imputación que se encuentra compuesta de dos ilícitos en concurso real cometidos en un lapso de tiempo próximo entre sí (robo agravado por su comisión con efracción y escalamiento, y robo simple), lo cual resulta un parámetro de aumento en el quantum de la sanción puesto que devela un mayor reproche en la intimación.»
El juez también reseña como argumento para confirmar la preventiva la forma en que el encausado participó de los delitos que se le acusan y señala que el hombre actuó «con aprovechamiento de la nocturnidad para evitar ser vistos por terceros y, también, registrándose en ambos sucesos la sustracción de una gran cantidad de elementos de considerable valor en domicilios particulares.»
Los hechos que le imputan
El hombre investigado está sospechado de haber sido parte de dos hechos delictivos sucedidos en el transcurso de este año en en Olavarría.
En principio, se lo investiga por un robo ocurrido en una vivienda ubicada en calle Cortes al 4000.
Según se desprende de los legajos judiciales el 23 de abril de este año, el delincuente ingresó a esa vivienda tras saltar un paredón y, posteriormente, causar daños en una puerta balcón que da al patio de la finca. Todo sucedió en horas de la madrugada de aquel día.
Para poder entrar a la vivienda, el delincuente usó un terreno baldío contiguo a la finca.
Una vez dentro de la vivienda se detalla que se alzó con los siguientes elementos: una pistola de calor marca Salkor; un parlante marca JBL; un compresor digital de vehículo; un compresor de vehículo marca Total, una notebook marca Bangho, una bolsa que poseía ropa de mascotas y collares, una Amoladora Makita; un bolso que contenía distintos elementos destinados al cuidado de mascotas. Además se llevó dos cinturones de seguridad de perros, entre otros elementos.
Sin ser descubierto, el delincuente, logró fugarse con el cuantioso botín.
Posteriormente, en un segundo hecho, el sujeto ingresó a una vivienda ubicada en 25 de Mayo al 1200. Esto sucedió entre el 12 y 13 de septiembre.
Con el avance de la causa judicial se logró determinar que para ingresar a esa vivienda el sujeto rompió la puerta de acceso principal. Allí, una vez dentro, logró robar una patarrera; dos amoladoras; una sierra circular; una canteadora; una frezadora marca; dos agujereadoras; una grifería completa; un lavatorio de pared; sargentos de carpintería; una desmalezadora; un portero eléctrico, entre otros elemento.
La evidencia de las huellas dactilares fue clave
Tal como se señaló en el momento en que el hombre fue detenido para llegar eso fue clave la evidencia de las huellas dactilares del encargado.
Se indicó que el Gabinete Táctico Operativo de la Comisaría Segunda inició las tareas investigativas que permitieron identificar a Matías Ezequiel Juárez como el principal sospechoso. La evidencia se reforzó con un informe de la Coordinación Científica Regional Atlántica que confirmó la coincidencia de huellas dactilares del imputado en la escena del crimen.
En aquel momento, la Justicia emitió una orden de allanamiento, registro y secuestro para cuatro domicilios: uno en la calle Aguilar al 600, otro en la calle 12 al 3500, y dos en la calle 10 al 3900. Este último es la residencia habitual de Juárez, mientras que en los otros solía alternar su estadía.
Cuando fue detenido, el operativo se realizó de manera simultánea en las cuatro direcciones, con la participación de personal de la Comisaría Primera Olavarría, la Sub DDI, la UPPL, la Comisaría de la Mujer y la Familia, la Subcomisaría Sierras Bayas y Loma Negra, y el grupo GAD. La acción policial arrojó un resultado positivo y se logró la detención de Juárez en su domicilio de la calle 10.
El imputado, de 25 años, quedó detenido y fue trasladado a la dependencia policial, donde permanecerá alojado a disposición de la UFI interviniente.
