10 años del legendario triunfo del equipo bataraz de básquet

El 25 de mayo se cumplieron diez años del mítico triunfo del Club Atlético Estudiantes en la Liga Nacional de Básquetbol. Allá por el 2000, el equipo liderado por Sergio Santos Hernández alcanzaba el podio tras vencer en la final a Atenas de Córdoba por 80 a 71.
A través de este medio realizamos un breve repaso de aquel momento memorable del básquet bataraz, que tan bien representó a nuestra ciudad en esa época de oro.

“Hoy es el día más feliz de mi vida. Recibí llamadas de muchísima gente deseándome suerte y gracias a Dios pudimos ganar el título”, señaló el “Oveja”, Sergio Hernández, luego del partido final, al saberse campeones de la Liga. Y añadió: “Ganarle así a Atenas, en un final cerrado donde ellos mejor juegan, tiene un mérito enorme. Estudiantes demostró hambre y personalidad, y nada menos que frente al mejor equipo de la historia del básquetbol argentino”
Las diez claves del técnico bahiense para lograr el tan preciado título fueron las siguientes, según lo publicara la revista “Deportivo Regional” en mayo del 2000:

1. La confianza absoluta que los dirigentes depositaron en mí, jamás me hicieron un cuestionamiento.

2. Trabajo, disciplina y armonía.

3. Convicción del estilo de juego a emplear y mantenerlo toda la temporada.

4. Entendimiento por parte de los jugadores del rol a asumir y dar todo en pos del equipo.

5. Exacta mezcla de experiencia y juventud.

6. Apoyo silencioso de los dirigentes.

7. Apoyo incondicional del público.

8. Calidad de vida: micro, traslados, hospedajes, estadio, gimnasio de pesas, preparador físico, médico, kinesiólogo, utilero, planillero, asistentes.

9. Humildad y perfil bajo del equipo.

10. Manejo psicológico de los triunfos y las derrotas.

Los que más jugaron: Rubén Wolkowyski estuvo como titular en los 58 partidos, actuando 1996 minutos (34,4 por juego). Gianella ingresó en todos, en 16 como titular. J.J. Eubanks fue quien jugó la mayor cantidad de minutos, a pesar que faltó en tres partidos: 2042 (35,2 por juego).

El goleador: Eubanks fue el goleador de la Liga 99-00. Acumuló 1514 puntos en los 55 partidos (27,45 de promedio)

Efectividad: Claudio Farabello fue el más efectivo en tiros de dos puntos, con el 68,4 % (52 de 76). En tiros de tres se destacó Eubanks con el 40,8 % (84 de 206) aunque el mejor porcentaje fue para Federico Arce (75% con 3 de 4). En libres también sobresalió Eubanks con el 88,8 % (390 de 439), pero el cordobés José Mikulas tuvo el 92,9 % (13 de 14).

Rebotero: Wolkowyski logró en promedio 7,1 capturas por juego, sumó 317 rebotes en defensa y 96 en ataque). Mc Cray le siguió con 5,9.

Asistentes: Gustavo Fernández y Daniel Farabello compartieron el liderazgo en el rubro, con 2,9 pases gol por juego. El Lobito totalizó 167 en 57 partidos y Dani 162 en 56.

Pérdidas: Gustavo Fernández sumó 105, Mc Cray 104 y Eubanks y Wolkowyski 103. El que tuvo menos pérdidas de los que más jugaron, fue Víctor Baldo, 32 en 35 partidos.
Recuperos: Farabello ganó por escándalo con sus tres balones recuperados por juego (167 en 56 partidos).

Tapas: Wolkowyski promedió 1,46 por juego (85 en la Liga), pero Baldo que totalizó 13 en el torneo hizo 4 en el séptimo juego de las finales, siendo vital para el resultado del mismo.

Los campeones: 4 Gustavo Fernández, 5 Víctor Baldo, 6 Federico Marín, 7 Darío Mansilla, 8 Daniel Farabello, 9 Rubén Wolkowyski, 10 Nicolás Gianella, 11 Claudio Farabello, 12 José Mikulas, 13 John Eubanks, 14 Federico Arce, 15 Dwayne Mc Cray.
Además jugaron Keith Nelson, Ignacio Ochoa, Bruno Tosetto y Fernando Mendía.
Integraron la Lista de Buena Fe: Lucas Moyano, Diego Latasa, Sebastián Tosetto, Paolo Tosetto y Ramiro Lorenzo.
DT: Sergio Santos Hernández. AT; Alejandro Pepiche. PF: Claudio Alvarez. Médico: Dr. Horacio Iraporda. Kinesiólogo: Silvio Gatti. Utilero: Ricardo Moyano. Manager: Rubén Rubiolo.

Rubén “El Colo” Wolkowyski. Prestigioso basquetbolista, nacido en Castelli en 1973. Llegó a nuestra ciudad tras una confusa desvinculación con el Club Boca al cual pertenecía. No fue muy bien recibido. Fue tildado por el común de la gente y algunos sectores del periodismo como “Pecho Frío”, “perdedor”, “amargo” y demás descalificaciones. Pero el Colo no se desanimó. Todo lo contrario, cobró fuerzas para demostrarle a todos que de perdedor no tiene un pelo.

“Estaba un poco golpeado, pero eso me hizo mucho más fuerte y logré ver cosas que antes no me daba cuenta. Jugar en Olavarría lo tomé como una revancha, como una nueva posibilidad de salir campeón de la Liga” contó y agradeció a “Sergio (Hernández), por haberme dado la posibilidad de integrar ese equipo y después a Estudiantes, por supuesto” dijo Wolkowyski. Y Añadió: “Estudiantes fue el gran impulso de mi carrera. Como el trabajo que hizo Sergio (Hernández). Más allá que hace poco tuve una diferencia estúpida, por cosas que tendría que haber hablado con él, mi relación con el entrenador en ese equipo no la tuve con ningún otro. Se formó una gran amistad, que se extendió a las familias afuera de la cancha, y todavía lo sigo sintiendo como una gran persona y un gran amigo”.

El basquetbolista guarda gratos recuerdos de la temporada ‘99/’00 en el club bataraz. “Disfrutamos mucho toda esa temporada – señaló – porque la gente se pegó a este equipo y hubo una química entre nosotros y ellos realmente increíble, que no sentí antes en Quilmes ni en Boca” dijo este hombre, que tiene el record de partidos jugados en mundiales de básquetbol por un argentino.

Además, el Colo recordó una anécdota: al instante de consagrarse campeones de la Liga Nacional con Estudiantes, tras vencer a Atenas de Córdoba, el jugador, ante un periodista de TyC; exclamó: “Es para los hijos de puta que no confiaron en mí y que me usaron como chivo expiatorio”.

Wolkowyski se consagró como el jugador más valioso de la Liga; y tras aquella temporada fue convocado por la NBA para jugar en los Seattle Supersonics.

Hoy, el Colo acaba de cerrar una nueva temporada de la Liga Nacional con la casaca de Libertad de Sunchales. Pero afirmó que “lo que vivimos y lo que disfrutamos tanto yo como mi familia en Olavarría no lo conseguimos en ningún otro lado”.