León, Abel y Andrés en Olavarría. ¡Impecables!

Difícil será en este año que se sienta un espectáculo de la característica como el que en la noche del sábado unos 900 olavarrienses, vivimos en el gimnasio de Racing con la presencia de: León Gieco, Abel Pintos y D-mente (Andrés Giménez) en “unidos por partida triple”.

Un escenario montado con buena Iluminación, equipamiento de sonido y video (provisto por una empresa local), con platea más folklórica que roquera y popular mas roquera que folklórica; a las 22.10 aparecen sobre las tablas los tres notables músicos.

Toma la palabra León y prepara a la platea folklórica para lo que venia, “es un espectáculo para universitarios”, “hay muchos que son estudiantes toda la vida”, afirmo León. “Todos somos rokeros o el rock no es violencia” dijo Andrés Giménez.

Después de estas explicaciones necesarias, para lo que es el show en su primera parte iniciaron los tres con una canción emblemática de León (La colina de la vida) y con D-mente en versión rock duro (hombres de Hierro).

De ahí por cuatro temas el gimnasio tembló con D-mente (“Luz”, “Valiente”, “Creí sin ver», «Sangre”, y “Sueño en gotas”), esta ultima con Abel Pintos.

Escenario para Abel y su banda que junto a León inician con “Mi pueblo Azul” para que después el nativo de Ing. White nos deje delicadas versiones de: “Solo canto por vos”, “La Filosófica”, “Lucero”, “Bailando con tu sombra”, “El beso/quisiera”, “Taki ongoy”, y “Zamba del carnaval” esta ultima con Andrés. Intervalo mediante, la escena la ocupa León, quien solo con su guitarra inicia un homenaje a emblemáticos de la música latinoamericana como Maria Elena Walsh (“La cigarra”), Leda Valladares (“Canto en la rama”), Alfredo Zitarrosa (“Zamba por vos”), Antonio Tormo (“Puentecito de mi río”), Jorge Cafrune (“Cuando llegue el alba” ), Violeta Parra (“Casamiento de negro”), Atahualpa Yupanqui (“Guitarra”), y Juntos los tres interpretan una versión muy efectiva de “La maza”.

De ahí hasta el final se vivió a “León roquero “con los músicos de D-mente (Lizárdo Álvarez en guitarra, Marcelo Baraj en batería, y Cristian Cochiararo en Bajo), y versiones de “El fantasma de Canterville”, “Ídolo de los quemados”, “El ángel de la bicicleta”, “Pensar en nada”, “La mama de Jimmy”. A la 1.50 hs de la mañana todo termino con todos juntos (incluido el publico de pie) con “5 Siglos igual” y la infaltable “solo le pido a dios” en versión rock. Aplausos, muchos aplausos y se sentía en la salida del concierto esa sensación que solo los grandes y comprometidos puede lograr en el espectador: Emoción, música plena, y el alma llena.

Observaciones: Racing no es el lugar para un show de estas características, poco público en relación a la calidad del espectáculo, e irrespetuosa acción de quienes atendían la cantina del gimnasio. (En un momento de la charla con la gente en el homenaje de León a músicos latinoamericanos, tuvo que decir: “por lo menos conviden con un sándwich” por el alto volumen de las conversaciones en ese sector por parte de quienes atendían).

Gracias a todos por la noche del sábado.

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