Del Zotto entrevista a Baudelaire: “No tengo convicciones”

Las entrevistas se realizaron en la época de los entrevistados. El entrevistador, el escritor Guillermo Del Zotto, no revelará el secreto de viajar en el tiempo porque entrevistador que lo haga mal entrevistador será.

Charles Baudelaire es el embajador de Edgar Allan Poe, el profeta de Rimbaud y el autor de “un nuevo estremecimiento” en la literatura, al decir de Víctor Hugo. Nació en París en 1821 y tuvo las clásicas etapas de los genios: niñez turbulenta por culpa del padrastro, relación simbiótica con la madre y una carrera literaria sin fortuna. Con mujeres, alcohol y derivados. Lo sometí a un ping pong de preguntas:

-¿Qué es para usted la música?

-Una fuerza que agujerea el cielo.

-¿La acción?

-Ser un hombre útil me pareció siempre algo muy odioso.

–¿Un dandy?

-Alguien que aspira a ser sublime sin interrupción: debe vivir y dormir ante un espejo.

-¿Cómo comenzaría una novela?

-Empezaría un tema por cualquier lado y para tener deseos de terminarla, comenzaría con frases muy hermosas.

-¿Qué son las ideas?

-En la gestación de cada pensamiento sublime hay una sacudida nerviosa que se hace sentir en el cerebelo.

-¿Un pensamiento con fecha?

-Cultivé mi histeria con fruición y con terror. Ahora tengo siempre el vértigo, y hoy, 23 de enero de 1862, sufrí una singular advertencia: sentí pasar sobre mí el viento del ala de la imbecilidad.

-¿Convicciones?

-No tengo convicciones, del modo como lo entiende la gente de mi época, porque no tengo ambición. No hay en base en mí para una convicción. Hay una cierta cobardía, o blandura, en la buena gente.

-¿Revolución francesa…?

-En todo cambio hay algo de infame y de agradable a la vez; algo que participa de la infidelidad y de una mudanza. Eso basta para explicar la Revolución francesa.

-¿El humor?

-Un recién llegado, con tal que sepa divertir, tiene derecho a hablar de sí mismo.

-¿Un consejo?

-Si trabajaras todos los días, la vida te sería mas soportable.

-¿La belleza?

-Lo que no es ligeramente deforme tiene un aire insensible; De donde se sigue que la irregularidad , es decir, lo inesperado, la sorpresa, el asombro, son una parte esencial y la característica de la belleza.

¿La prensa?

Es imposible recorrer un periodico cualquiera, de no importa qué día o qué mes o qué año sin encontrar a cada linea los signos de las mas espantosa perversidad humana, al mismo tiempo que las mas sorprendentes jactancias de probidad, bondad, caridad y las afirmaciones mas descaradas sobre el progreso y la civilización. Todo periódico, de la primera a la última linea, no es más que un tejido de horrores. Guerras, crímenes, robos, impudicias, torturas, crímenes de los príncipes, crímenes de las naciones, crímenes de los particulares, una borrachera de atrocidad universal. Y es con ese repugnante aperitivo que el hombre civilizado acompaña su comida cada mañana.

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