Tapalqué: Prisión domiciliaria para el productor agropecuario que mató al amigo de sus hijos
Fuente: Diario El Tiempo / Foto: Nicolás Murcia
Néstor Félix Hirtz, el productor agropecuario que -en lo que él mismo dijo que intentó ser una broma- mató de un balazo al amigo de sus hijos, crimen ocurrido en Tapalqué el 5 de julio de 2020, comenzará en los próximos días a gozar de una morigeración de prisión.
En respuesta a un recurso presentado por su actual Defensa Particular, después de que un habeas corpus en favor del encausado fuera denegado en la Cámara Penal departamental, ese beneficio le fue otorgado por el Tribunal de Casación Penal bonaerense.
Tras la realización de un juicio con jurados en los tribunales de Azul, Hirtz había sido sentenciado a trece años de prisión por la Jueza que intervino en aquel debate, cuyo veredicto de culpabilidad para el estanciero se anunciara en febrero de 2023.
Oriundo de la zona rural de Quehué, en la provincia de La Pampa, y actualmente de 70 años de edad, la morigeración para ese hombre implicará que deje la Unidad 7, el penal donde está alojado, para seguir preso -con «control de monitoreo electrónico» desde el SPB- en un domicilio de Azul que está situado sobre la calle Rivas.
Así se refiere en lo resuelto este martes que pasó desde la Alzada con asiento en La Plata y que, posteriormente, aquel mismo día fuera informado al Tribunal Oral en lo Criminal número 2 con sede en el Palacio de Justicia de Azul.
A través de ese tribunal se había desarrollado el debate que, declaración de culpabilidad mediante por parte del jurado de civiles para Hirtz como autor de un homicidio agravado por el uso de arma de fuego, luego había derivado en que la magistrada Alejandra Raverta lo sentenciara a esa pena ya referida de trece años de prisión, a través de una resolución que data del 1 de marzo de 2023.
Varias obligaciones
La medida para el encausado todavía no se hizo efectiva y continúa en la cárcel con asiento en Azul porque resta terminar de instalar el sistema a través del cual, en esa casa donde seguirá privado de su libertad, deberán ser controlados sus movimientos desde el Servicio Penitenciario Bonaerense.
Además, para que no sea revocado lo decidido hace cinco días desde la Casación, que implicará que le sea colocada una pulsera electrónica, mientras permanezca en la referida vivienda Hirtz deberá cumplir con varias obligaciones.
«No ausentarse del domicilio por ningún motivo, salvo cuestiones médicas urgentes debidamente acreditadas», «someterse al cuidado y control» de la mujer que figura como garante del beneficio, «no abusar del consumo de bebidas alcohólicas ni consumir sustancias estupefacientes» y la prohibición absoluta de recibir en esa casa a «personas ajenas a su círculo familiar» forman parte de las pautas de conducta que el productor agropecuario tiene que acatar.
Precisamente, sobre la base de una de las pautas de conducta fijadas ahora para el autor del homicidio del joven Tomás Echegaray, la relacionada con «cuestiones médicas», giraron varias de las peticiones que sus defensas formularon ante diferentes instancias judiciales, en busca del beneficio que ahora sí le ha sido otorgado al productor agropecuario.
En este caso, lo decidido desde una de las salas de la Casación estuvo relacionado con un recurso formulado por sus actuales defensores particulares: Cristian Cúneo Libarona y Tomás Uranga.
Ambos pasaron a ejercer la representación legal del todavía encausado, teniendo en cuenta que el fallo condenatorio para el productor agropecuario surgido de aquel juicio en los tribunales de Azul aún no adquirió rango de firmeza, tras lo que había sido la realización del debate.
En el juicio con jurados que finalizara en marzo del año pasado y en la previa a que la muerte de Tomas Echegaray se convirtiera en materia de ese proceso, quienes se desempeñaron como sus defensores particulares fueron otros abogados: Ricardo Boucherie y Juan Carlos Scirica.
«Un serio peligro de muerte», según su Defensa
Tanto los primeros representantes legales de Hirtz como los actuales formularon varias solicitudes para que le sea concedida la referida morigeración de prisión, argumentando siempre para el otorgamiento de dicho beneficio diferentes patologías de salud que el productor agropecuario oriundo de la provincia de La Pampa padece y que, en un contexto de encierro como el carcelario, supuestamente impiden que reciba una adecuada atención médica.
Pero aquellos pedidos no prosperaron ante diferentes instancias por las que esta causa atravesó en el ámbito del Departamento Judicial Azul.
«Si bien el recurrente ha invocado la situación de salud del causante, señalando que el mismo padece de diversas patologías (hipertensión arterial, hernia de hiato, hernia discal y discopatía en columna lumbosacra), y ha centrado su petición de prisión domiciliaria en la necesidad de llevar a cabo tratamiento médico fuera del ámbito de encierro actual; lo cierto es que, conforme lo señala la magistrada de la instancia -escribió el camarista Agustín Echevarría teniendo en cuenta lo que tiempo antes resolviera la jueza Alejandra Raverta-, de los exámenes médicos que obran no se ha logrado determinar que las enfermedades que padece no puedan ser tratadas dentro del ámbito del Servicio Penitenciario».
Previamente a que Hirtz fuera juzgado y condenado, así se refería en una de las resoluciones a través de la cual los miembros de la Cámara Penal confirmaron en octubre de 2022 la denegatoria a uno de esos pedidos para que el productor rural pudiera gozar de una morigeración de prisión en similares condiciones a la concedida ahora.
Al parecer, a esos problemas de salud que por aquel entonces padecía mientras estaba en la Unidad 7 actualmente se han agregado algunos más e hicieron que el martes que pasó, desde una de las salas del Tribunal de Casación Penal provincial, finalmente fuera concedido al estanciero ese beneficio que se pretendía.
En uno de los escritos más recientes de los actuales abogados de Hirtz se pedía una morigeración de prisión en busca de que deje la cárcel en lo «inmediato», considerando para ello dictámenes médicos que habían concluido que «un serio peligro de muerte» evidencia el homicida de Tomás Echegaray en ese contexto de encierro en la Unidad 7 a causa de las diferentes patologías que presenta.
Sus defensores particulares hablaban también de «un serio empeoramiento» de su estado de salud, circunstancia por la que se requería su inmediato traslado a un domicilio particular; tal como recientemente se decidió desde la Casación mediante la concesión de esa morigeración de prisión. El beneficio que en los próximos días lo tendrá al productor agropecuario cumpliendo arresto domiciliario en una vivienda de Azul.
Un rociador con alcohol en una mano y un revólver de grueso calibre en la otra
«Nosotros, el jurado, en nombre del pueblo encontramos a Néstor Félix Hirtz culpable de haber dado muerte a Tomás Echegaray utilizando un revólver marca Smith & Wesson calibre 44 que manipulaba, representándose que con su accionar podía causarle la muerte».
El viernes 24 de febrero de 2023, tras deliberar por alrededor de una hora, el jurado de civiles que intervino en aquel debate desarrollado en el Palacio de Justicia de Azul declaraba «culpable» al productor agropecuario de la muerte del joven amigo de sus hijos. Y cinco días después, la jueza Alejandra Raverta le dictó esa pena de trece años de prisión a Hirtz, sanción que en aquel entonces ya lo tenía preso en la Unidad 7 de Azul.
El hecho por el que fue condenado en el debate se remonta a lo sucedido el 5 de julio de 2020 en Tapalqué.
En plena vigencia de la crisis sanitaria decretada por la pandemia de Coronavirus, en las primera horas de aquel día domingo la víctima y otro joven habían ido a la casa de Tapalqué donde vivía Hirtz.
Ambos tenían previsto encontrarse con uno de sus hijos. Y en esas circunstancias el productor agropecuario -aficionado y coleccionista de armas de fuego, varias de las cuales tenía en su casa- decidió hacerle una macabra broma a Tomás.
De esa manera, según él mismo después contaría en el juicio donde fue condenado, aguardó a que el joven atravesara la puerta de su vivienda, situada sobre la calle Luis Brané, portando en una de sus manos un rociador con alcohol y en la otra empuñando ese revólver de grueso calibre y de alto poder de vulnerabilidad que estaba cargado.
Con esa arma de fuego, que según dijo Hirtz se accionó de manera fortuita, le disparó desde una muy corta distancia a la víctima de este hecho.
El proyectil que partió de ese revólver ingresó en la fosa ilíaca de Tomás Echegaray, afectó a su arteria aorta y atravesó su cuerpo, en medio de un recorrido que después incluyó que impactara también contra la carrocería de una camioneta propiedad del autor de este homicidio.
Un hijo de Hirtz, quien se convirtió en testigo de lo ocurrido, llevó a su amigo hasta el Hospital de Tapalqué, donde al constatarse la gravedad de la herida de bala que presentaba se decidió que fuera derivado al Pintos de Azul.
Pero Echegaray, que tenía 26 años de edad, no alcanzó a llegar con vida al hospital de Azul dado que murió en la ambulancia camino al centro asistencial.