Motín de Sierra Chica: “Lo de las empanadas fue una leyenda”
Presentaron un nuevo informe sobre los sangrientos hechos ocurridos hace 28 años en Sierra Chica.
El mes de abril siempre será recordado en Olavarría por lo que significó en la historia penitenciaria el sangriento motín en la cárcel e Sierra Chica. Sobre este hecho, que se produjo entre el 30 de marzo y el 7 de abril de 1996, mucho se ha dicho, mucho se ha escrito y mucho aún sigue siendo parte de los mitos o leyendas de la historia “tumbera” de la Argentina.
El pasado 21 de abril, el diario Clarín estrenó un nuevo episodio de “Archivos Messi” que realiza Virginia Messi. En el recorrido de está pieza audiovisual se recuperan testimonios, todos valiosos y estremecedores, y además se actualizan testimonios.
Una de las entrevistas que se suman a este estreno de “Archivos Messi” es la que Virginia Messi le realiza al doctor Adolfo Rocha Campos, ex juez Civil y Comercial del Departamento Judicial de Azul e integrante del Tribunal que juzgó a los 12 Apóstoles luego de una sucesión de excusaciones que hicieron otros Magistrados.
Durante el Motín fue secuestrada la doctora María de las Mercedes Malere, ex jueza de Azul.
Ese juicio, cuyo Tribunal integró Adolfo Rocha Campos, fue el primer proceso en toda Latinoamérica que se realizó a través de Videoconferencia. En este sentido, la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires está iniciando un proceso de digitalización de los cientos de VHS que permanecen archivados en el Palacio de Justicia de la ciudad de Azul.
El trabajo que llevará adelante el máximo tribunal bonaerense será de suma importante para dejar registro histórico de lo que sucedió en aquellas audiencias que terminaron en la condena de “Los 12 Apóstoles.”
Los testimonios de Adolfo Rocha Campos
Durante el episodio de “Archivo Messi”, el doctor Adolfo Rocha Campos recupera parte de lo que sucedió en el juicio y lo vincula con lo que pasó en aquella Semana Santa de 1996. Uno de los primeros testimonios hace especial mención al inicio del motín y al tiroteo entre presos y guardiacárceles.
Cuenta Rocha Campos que después del tiroteo inicial en la tarde del 30 de marzo de 1996, “varios guardiacárceles salen heridos y varios presos salen heridos. Para que los guardiacárceles pudieran ser llevados a atención médica, el jefe de la banda, que era Marcelo Brandan Juárez, dijo por cada guardia que sale, tienen que entrar dos guardias más. Es decir que entraron cuatro guardiacárceles. Esos guardiacárceles entraron voluntariamente, voluntariamente, para reemplazar a sus compañeros caídos. Y se metieron en un lugar manejado por un loco y poniendo en peligro su propia vida.”
Más adelante en un relato acompañado por imágenes y recortes gráficos de la época, Rocha Campos se refiere al momento en que fue puesta de rehén la jueza penal de Azul, doctora María de las Mercedes Malere. La Magistrada, y su secretario, quedaron en poder de los reclusos la misma tarde del 30 de marzo de 1996.
“La jueza entró porque es realmente una mujer, una jueza muy aguerrida, muy valiente, una mujer excepcional”, dice Rocha Campos sobre el intento de su colega de desactivar el motín y su decisión de ingresar a la cárcel.
“Cuando entra, se produce la desdichada situación de que todos los presos, la gran mayoría, sobre todo los cabecillas estaban totalmente empastillados. Estaban totalmente dados vuelta porque habían asaltado la enfermería y se habían tomado todas las pastillas que encontraron, todo alcohol que encontraron y entonces toman de rehén a la jueza”, relata Rocha Campos.
Rocha Campos habló del arma en poder de la banda de Brandan como así también la hipótesis de que la doctora Malere haya entrado engañada por el SPB al penal en medio del motín.
“El Servicio Penitenciario sabía que estaba el arma, porque eso lo declararon el juicio, pero no se lo decían a los guardiacárceles porque si se lo decían a los guardiacárceles no iban a querer entrar a los pabellones”, dijo Rocha Campos.
En esta nueva producción alrededor del Motín se reinstala la hipótesis de la fiscalía en el Juicio que indicaba que la doctora Malere investigaba el uso indiscriminado de las celdas de castigos, entonces, según el Fiscal así se vengó el SPB.
La otra de las escenas que relata Rocha Campo es el momento en que cae muerto, el preso Agapito Lencina. El testimonio del ex juez se escucha con imágenes actuales registradas en la Unidad 2, más precisamente en el Patio del Sector de Control de los Pabellones. Agapito Lencina estaba en el Pabellón 8 y allí fueron los otros presos (la banda de Brandan) a matarlo.
“La banda de Brandan tenía el armas y la banda de Lencina no tenía más que facas. Entonces, la banda de Brandán extermina a la banda de Lencina, le mata a cuatro o cinco de sus integrantes y bueno…”, dice Rocha Campos
Agapito murió de dos balazos por las espaldas y después recibió varias puñaladas.
Tras la muerte del reo aparecen las primeras versiones sobre lo que pasó con la cabeza de Agapito. Algunas versiones (o testimonios) aseguran que durante el motín los presos jugaron al fútbol con la cabeza de Lencina.
Al respecto, Rocha Campos citando a un profesional médico sostiene en está última entrevista sobre el motín: “la cabeza de un preso, la de un ser humano, pesa más o menos tres kilos. Si una persona le pega una patada a una cosa de tres kilos, lo más seguro es que se rompa el pie. Entonces, es posible que le hayan pegado alguna patada a la cabeza de Lencina, pero de jugar al fútbol, no.”
En el devenir de está excelente producción realizada por Clarín aparece lo que pasó en la Panadería de la cárcel donde fueron “quemados” los cuerpos de siete de los ochos muertos del motín.
Rocha Campos dice sobre la cremación intramuros: “cuando comenzaron a quemar los cuerpos, la panadería, por supuesto, tenía una chimenea que estaba al ras del muro. Y los guardias que estaban cerca de la chimenea se descompusieron por el olor repugnante y nauseabundo que producían los cuerpos en quema.”
Agapito fue el interno peor tratado (vivo y muerto) durante todo el motín de hecho se sostiene que con carne de sus nalgas “Los 12 Apóstoles” realizaron las empanadas que luego dieron de comer a los guardias.
De las empanadas se habló en el juicio: “te comiste un preso”, fue la frase que se escuchó en el juicio aunque ese hecho nunca fue comprobado. Al respecto, el doctor Rocha Campos sostiene: “se habló de las empanadas, pero no se comprobó. Los de las empanadas yo creo que fue una leyenda que introdujeron los reclusos, los jefes de la banda, con el fin de intimidar a todos los presos. Y decir ´miren que malos somos, que le estamos haciendo comer empanadas de carne humana. Así que tengan cuidado con lo que van a hacer.” Para el doctor Rocha Campos “lo de las empanadas” fue “una forma de establecer el orden.”
De manera categórica, y dado que no se probó, Rocha Campos sostuvo que lo de las empanadas “fue una leyenda.”
Archivo Messi
Además de los testimonios de Adolfo Rocha Campos la producción de Clarín conducida por Virginia Messi permite revivir uno de los episodios más importantes de la historia de Sierra Chica, Olavarría y el Servicio Penitenciario
