Condenaron a diez años de cárcel a un carpintero olavarriense que abusó de su hija
El la identidad del condenado se mantienen en reserva para proteger a la menor víctima y toda su familia.
Un carpintero olavarriense de 42 años fue condenado a diez años de prisión luego de comprobarse que abusó durante cuatro años de su hija menor edad.
La sentencia fue dictada por los Jueces del Tribunal en lo Criminal N° 2 del Departamento Judicial de Azul, Dra. María Alejandra Raverta, Dr. Joaquín Duba y el Dr. Javier Alberto Barda.
En el veredicto condenatorio quedó probado que los abusos sexuales se cometieron entre los años 2018 y 2021 en un departamento ubicado en el barrio Pueblo Nuevo de Olavarría donde vivía el condenado.
La Justicia valoró con firmeza el relato de la víctima y dio por probado que el hombre durante esos años llegó a abusar de su hija, “al menos tres veces por semana”.Los aberrantes hechos ocurrieron cuando la pequeña tenía entre 9 y 11 años.
El hombre condenado se encontraba separado de la madre de su hija, por lo que los hechos probados por la justicia se cometieron cuando víctima y victimario se encontraban solos en ese departamento.
El carpintero fue condenado por “Abuso sexual gravemente ultrajante doblemente agravado por ser cometido por un ascendiente y por ser cometido contra un menor de 18 años aprovechando la situación de convivencia preexistente con el mismo”.
“Yo creo yo creo que tuve las relaciones sexuales que uno no quiere”
En un tramo de los fundamentos de la sentencia, aparece la declaración de la víctima en el sistema de la Cámara Gesell durante la instrucción de la causa que ahora terminó en condena.
Uno de los datos que se pueden inferir, es que el ámbito educativo tuvo fuerte incidencia para que la víctima pudiera explicar qué era lo que su padre había hecho con ella. En un momento, la menor cuenta que fue una “seño” de la escuela quien le explicó que existían relaciones sexuales que uno no quiere y de inmediato declaró: “yo creo que tuve las relaciones sexuales que uno no quiere”.
Además, en el relato de la menor quedó probado que los hechos de los que estaba siendo víctimas quedaron escritos en un diario intimo. La víctima aclara que en esos relatos del diario intimo no usó el nombre de su padre. “Lo escribí pero con otro nombre, “…no quería poner X ahí y nada porque era mi papá”, se lee en la sentencia.
Los comentarios están cerrados.