Baja de Imputabilidad: Opinan Ezequiel Galli y Alejandra Capriata

En línea Noticias convocó a sumarse al debate nacional a dirigentes políticos, jueces, abogados y dirigentes de la ciudad de Olavarría y la región en una serie de publicaciones que se efectuarán en este portal este fin de semana.


Ezequiel Galli. Intendente Municipal. Además de pedir un debate profundo consideró que los menores conocen la criminalidad de sus actos.

El Jefe Comunal expresó: «estoy de acuerdo con el proyecto, creo que el tema merece un debate más que profundo. Creo que ya no podemos pensar que los menores no conocen la criminalidad de sus actos y que entienden perfectamente en situación de puerta giratoria y lo expresan abiertamente. Es así como aprovechan esa oportunidad para cometer delitos y que no van a tener ninguna pena. Debemos avanzar en un proyecto bien serio y bien debatido para bajar la edad de imputabilidad.»

 

Por otro lado Doctora Alejandra Capriata. Médica pediatra. Titular de la Asociación de Profesionales del Hospital Municipal. Directora Municipal de Minoridad (2007-2008).

Alejandra Capriata

La profesional rechazó la posibilidad de modificar la edad de imputabilidad. Primero consideró: «Es increíble que ver a este Gobierno, por un lado, apretando cada vez más a los pobres, dandole cada vez menos oportunidades y ver que por otro lado le quieran bajar la edad de imputabilidad. El nivel de cinismo que tienen es vergonzoso, ellos mismos están generando todas las condiciones para que los pibes sigan siendo delincuentes.»

La médica fundamentó su postura: «particularmente no creo que sea una solución bajar la edad de imputabilidad de los menores, creo que con eso no se soluciona este problema. Ya tenemos una Ley provincial de Responsabilidad Penal Juvenil (Ley 13634) desde el año 2007. Esto genera responsabilidades penales para chicos de 16 y 17 años e incluso en los menores de 16 con delitos graves como violación, robo con arma, homicidio, lesiones graves están con penas de reclusión. Hay un marco legal que está conteniendo esto.  Esto genera responsabilidades penales para chicos de 16 y 17 años e incluso en los menores de 16 con delitos graves como violación, robo con arma, homicidio, lesiones graves están con penas de reclusión. Hay un marco legal que está conteniendo esto. No creo que la solución a la inseguridad pase por bajar la edad de imputabilidad de los menores, sabemos que los delitos, en general, no se producen por los menores de edad y es un porcentaje mucho menor a lo que la gente cree. Pasa que la influencia de los medios y la aparatología de algunos relatos donde han sido chicos de 15 años han sido los ofensores tienen una prensa que por cada delito con un menor hacen diez los mayores. Hay un componente de los medios, que fogonean y generan una concepción en la gente que dice ´los menores tienen que estar todos en cana´.

Agregó Capriata: «hay un montón de cuestiones, en lo social, que el Estado no cumple porque hay que ver que un chico llega a estas condiciones. Estos chicos llegan con una situación social y familiar deteriorada. En la mayoría son chicos de una franja social muy bajas y pocos recursos educativos, familiares y socioeconómicos. Es seguir judicializando la pobreza, sin hacer la otra parte que le compete al Estado que es garantizar a estos niños y su familia: un empleo, una educación y una salud digna. A todos los que se ocupan de los menores que delinquen deberían preocuparse más de las familias que no tienen garantizado el empleo, la vivienda y la educación de sus padres.»

Alejandra Capriata agregó: «dicen que bajar la edad de imputabilidad los asusta a los chicos y eso no pasa. Los países que han bajado la edad de imputabilidad no han logrado bajar los delitos de los jóvenes. Capriata citó el Digesto contra el Crimen Organizado donde se ponen en juego todas las medidas de prevención de la comunidad además de otras medidas que se toman para combatir el delito. Para la delincuencia juvenil las herramientas mas efectivas y que mejores resultados han dado son las que promueven la socialización y el cuidado de los niños desde pequeños. Esas naciones fortalecieron las Direcciones de Juventud y son estos los que se encargan de que los jóvenes tengan posibilidades de estudio y empleo. Todo hace que los jóvenes puedan abandonar los hábitos delincuenciales que los llevan a crímenes cada vez mayores.»

«Yo he trabajado mucho con los jóvenes ofensores de la Ley, cuando yo empece recién empezaba la Ley de Responsabilidad Penal Juvenil. Teníamos que instrumentar programas que le generaran actividades que les fueran saludables y que le sirvan para construirse como personas. Trabajé mucho con chicos muy complejos y a veces es difícil separar la programación que tienen desde sus familias, pero ningún pibe ni piba se resiste al trato con respeto y a la ternura», finalizó.

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