1999. Interludio

Opinión / Carlos Verucchi / En Línea Noticias (Twitter: @carlos_verucchi)
Para explicar algunos acontecimientos políticos del año 1999 en nuestro país, habría que empezar por las elecciones primarias abiertas de la Alianza para el Trabajo, la Justicia y la Educación que se realizaron el 29 de noviembre de 1998. Un año más atrás, todavía, en 1997, Gabriela Fernández Meijide encabezó la lista de diputados del FREPASO en la Provincia de Buenos Aires y le ganó a la candidata oficialista “Chiche” Duhalde.
Esta victoria parlamentaria le abriría grandes expectativas a la coalición opositora conformada por el FREPASO y la UCR. En aquel noviembre del 98, Fernando de la Rúa, candidato de la UCR, le ganó las elecciones primarias a Fernández Meijide y se convirtió en el candidato presidencial por la Alianza
El año que hoy nos ocupa, 1999, comenzó con una escalada de reclamos sindicales en todo el país. El nivel de desocupación y el empleo informal tocaban sus techos históricos y la apertura económica asfixiaba a la industria nacional.
Rechazado por la justicia el intento de re-reelección de Carlos Menem, el oficialismo se presentó a las elecciones de ese año con la fórmula Eduardo Duhalde y Ramón Ortega, y perdió por más de 10 puntos (es decir en primera vuelta) frente a la opositora Fernando de la Rúa y “Chacho” Álvarez.
En la provincia de Buenos Aires, paradójicamente, el peronismo recuperó los votos perdidos en el 97 e impuso a su fórmula para la gobernación: Carlos Ruckauf y Felipe Solá.
En nuestra ciudad, Helios Eseverri, candidato de la Alianza, renovó su cargo de intendente municipal y comenzó el tercero de sus cuatro mandatos ininterrumpidos (cinco en total si se toma en cuenta el período 83-87).
En la escena literaria nacional irrumpió ese año Samanta Schweblin, joven escritora que inauguró una nueva era en la que la literatura argentina estaría dominada mayoritariamente por mujeres.
El Boca de Bianchi ganó todo lo que jugó y se preparaba para el gran año 2000 en el que conquistaría el campeonato del mundo o copa intercontinental, tal como le llamaban entonces.
Nos vamos acercando al fin de siglo y también al fin de esta reseña histórica caprichosa y subjetiva. Con la crisis del 2001 cerraremos estas páginas debido a que, lo que vino después, está más emparentado con el presente que con el pasado, palpita todavía y no se resuelve, al menos en la mencionada subjetividad de este cronista.
Nos encontramos el domingo próximo.