Kicillof respondió los insultos de Milei: “El que grita es porque no tiene razón”
Luego de que el presidente Javier Milei lo insultara y lo llamara “pichón de (Iósif) Stalin”, Axel Kicillof respondió al ataque del mandatario nacional: “El que grita e insulta es porque no tiene razón”, sentenció el gobernador bonaerense, en medio de un nuevo cruce con Casa Rosada.

“El que grita e insulta es porque no tiene razón, sino podría venir a explicarlo tranquilamente que uno lo escucha”, sostuvo Kicillof al encabezar un acto en la ciudad de San Cayetano, donde entregó patrulleros para reforzar la prevención del delito.
El gobernador habló en Mar del Plata en un evento dedicado al programa Puentes, por el que se abren sedes universitarias en ciudades y pueblos del interior de la Provincia, luego de pasar por San Cayetano, donde también se refirió al tema.
“Escuché los cortos”, reconoció recién al final de un acto tan extenso como su discurso y eligió una respuesta moderada: “No me van a escuchar insultarlo y denigrarlo”, aclaró el mandatario bonaerense y frente a las expresiones agraviantes que recibió consideró que se contesta “recorriendo, acompañando, estando y resistiendo con los sectores que son víctimas de la política de Milei”.
“Le quiero explicar a Milei que cada vez que un pibe se recibe en una universidad aporta a la comunidad, a la sociedad en su conjunto y a la Nación”, dijo Kicillof y reclamó alternativas para que haya un acceso más amplio para toda la comunidad a la enseñanza superior desde el sistema público.
“Ya cansa: cuando insulta es porque quiere esconder o temas que no quiere hablar”, especuló el gobernador y arriesgó que la actitud de Milei con estos exabruptos “no sé si es marketing o inmadurez”. “De adolescente”, agregó, casi al mismo tiempo que frenó algunas expresiones subidas de tono contra el Presidente que llegaban desde la platea.
Al analizar el por qué es blanco de esas críticas hizo mención a lo que entiende que puede ser el inicio de la campaña electoral por la renovación legislativa que se viene, en septiembre próximo. Acompañó con otra hipótesis: “El objetivo es que estemos hablando de eso”, dijo y recordó lo que generó el Presidente por expresiones de Ricardo Darín y lo que valía una docena de empanadas, así como con otras figuras públicas.
“No es falta de respeto a mi persona, es a todo lo que está pasando en Argentina”, remarcó con intenciones de quitarle demasiada trascendencia a esas palabras subidas de tono que le dedicó, incluso con referencias a cuestiones físicas.
Kicillof le pidió a Milei que “en lugar de andar insultando recorra y se ocupe por una vez de los problemas de los argentinos de carne y hueso que pierden el laburo y no les alcanza la guita”, y citó a algunas personas con las que se había cruzado en sus escalas previas a Mar del Plata. Aseguró que “nadie en la provincia puede decir que le está yendo mejor”, remarcó que “nadie llega a fin de mes” y apuntó que esa misma expresión se la repitieron un empresario, un comerciante y un productor agropecuario “porque la plata no alcanza”.
Habló durante casi media hora e hizo foco en el sistema universitario y los ataques de la política económica nacional, con ajustes presupuestarios sobre el funcionamiento de las casas de estudio y también sobre los salarios de los trabajadores del ramo, según enumeró.
“Lo llaman libertad, pero lo que está avanzando es la restricción, la pérdida de derechos, más desigualdad y el intento de ir pinchando y achicando los sueños del pueblo”, acusó. En el escenario estuvo acompañado por Carlos Bianco, Alberto Sileoni y el diputado provincial y exintendente Gustavo Pulti.
Milei había lanzado los insultos ayer, durante su participación en el Primer Congreso de la Libertad Bonaerense que se realizó en La Plata. Allí llamó al gobernador “pelotudo”, “tarado”; “burro eunuco” y pichón de (el dictador soviético Iósif) Stalin. (DIB) AL