La Cooperativa Eléctrica de Azul en medio de un escándalo: Denuncias de estafas y licencia del presidente del Consejo de Administración
Las denuncias involucran a empresarios azuleños.
Con información del diario El Tiempo
En medio de denuncias de estafas, este martes se confirmó que el presidente de la Cooperativa Eléctrica de Azul (CEAL) solicitó una licencia médica de 60 días y en su lugar asumió Daniel Arrastúa.
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Este martes hubo una conferencia de prensa y lo comunicado hace pensar que el hecho se convertirá en un escándalo para el cooperativismo de la región.
Daniel Arrastúa inició la conferencia informando que el actual presidente de la cooperativa, el ingeniero Mario Fosatti, ha solicitado una licencia por razones de salud por un período inicial de 60 días, con posibilidad de extenderse según las prescripciones médicas.
Fosatti, quien -según se indicó- ha estado bajo un fuerte estrés, decidió apartarse temporalmente de sus funciones para priorizar su salud. Arrastúa asumió desde hace un mes la presidencia interina del Consejo Administrativo de la CEAL, asegurando que la situación institucional está bajo control y que la cooperativa continúa funcionando con normalidad.
El Dr. Luis Conti, asesor legal de la CEAL, explicó que Fosatti, en su solicitud de licencia, reconoció el exceso de responsabilidades federativas y la complejidad de los vínculos con los poderes públicos nacionales, provinciales y municipales. Además, el presidente en licencia pidió disculpas al Consejo por no haber participado en algunas decisiones clave, lo que generó cierta «tensión interna».
Investigación por una presunta estafa
Uno de los temas centrales de la conferencia fue la revelación de una investigación interna por una presunta estafa que involucra a personal de la cooperativa. Según explicó Juan Owen, tesorero de la CEAL, la investigación surgió a raíz de irregularidades detectadas por el sector de contabilidad y cómputos, en conjunto con una auditoría externa. Estas irregularidades incluyen facturas impagas y notas de crédito fraudulentas, que habrían sido utilizadas para desviar fondos de la cooperativa.
Owen detalló que los presuntos implicados son empleados de la cooperativa, quienes habrían aprovechado fallas en el sistema para cometer la posible defraudación. La CEAL ya ha identificado a los responsables y se espera que, una vez finalizada la investigación administrativa, se proceda con la denuncia penal y la separación de los empleados involucrados. «Vamos a ir hasta las últimas consecuencias», se afirmó, subrayando el «compromiso de la institución con la transparencia y la rendición de cuentas».
Respecto al impacto económico, Owen estimó que -aunque el número exacto aún se está determinando- la cifra de esta posible estafa rondaría los 150 millones de pesos, lo cual ha generado un perjuicio significativo para la cooperativa. La CEAL notificará a los usuarios afectados para que regularicen sus pagos y se tomarán medidas para evitar que situaciones similares se repitan en el futuro.