Caso Migliavacca: Seis meses y pocas respuestas

Este viernes se cumplen 6 meses de la trágica muerte de Jesica Migliavacca, la joven que a sus 20 años falleció el 24 de marzo, tras recibir un disparo accidental en un ojo de parte de Abel Avendaño.

El trágico episodio ocurrió por una pelea en San Martín y Rivadavia. Allí, Maximiliano Urrutia, conductor de un BMW blanco, habría protagonizado una fuerte discusión con Avendaño, conductor de un Volkswagen Gol bordó. Tras el altercado, Urrutia se subió a su auto y escapó del lugar vertiginosamente. Al llegar a Belgrano y Lamadrid el BMW colisionó a una camioneta de una panadería que estaba haciendo el reparto. Los conductores arreglaron el tema de los seguros y la camioneta siguió su recorrido.

Entretanto, se acercó al lugar Avendaño en el Gol, acompañado por dos mujeres, Jesica Migliavacca y Antonela Veneciano. El conductor, que habría protagonizado el primer episodio con Urrutia, descendió del vehículo con una escopeta 12/70 para intimidarlo. Los conductores volvieron a pelear en ese lugar, en plena calle, durante algunos minutos. Avendaño habría regresado al automóvil muy nervioso, colocando el arma entre medio de los dos asientos delanteros. En ese preciso instante se produjo un disparo dentro del vehículo, que sería el que dio directamente en el ojo derecho de Migliavacca y causó su muerte.

La causa tuvo innumerables giros hasta la fecha. Avendaño fue detenido dos veces, aunque en ambos casos resultó excarcelado. La causa fue recaratulada cuatro veces: comenzó siendo «Homicidio, portación de arma de guerra y lesiones leves» y finalizó en una desdibujada “coacción agravada”; pasando por “homicidio simple, tentativa de homicidio y portación de arma de uso civil sin la debida autorización” y “Homicidio culposo”.

La muerte de Jesica ocasionó una reacción del Municipio, los propietarios de lugares de esparcimiento nocturnos, y la comunidad toda. Reacción tardía, como es habitual en estos casos donde es necesaria una víctima fatal para que abramos los ojos. Pero esto no basta. Hoy por hoy, ya pocos hablan del caso. Mientras, familiares y amigos de Jesica continúan esperando Justicia.