Desarticularon una banda que estafó a Contador azuleño

Una investigación llevada adelante por el fiscal olavarriense Lucas Moyano terminó este miércoles con la detención de dos personas acusadas de formar parte de una banda que, entre otras cosas, estafó a un Contador Público Nacional con domicilio en la ciudad Azul.

Voceros oficiales informaron que se realizaron una serie de allanamientos ordenados por un Juez de Garantías de Azul. De los operativos tomaron parte efectivos policiales de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI).

Uno de los integrantes de la banda y ahora acusado de esta estafa virtual estaba preso en la Unidad Penal de Magdalena que depende del Servicio Penitenciario Bonaerense, dijeron los voceros que hablaron con En Línea Noticias. Además del reo, ahora en está causa está presa una mujer que fue detenida durante un allanamiento realizado en la localidad de Glew.

Los detenidos son Alan Daniel Díaz (25) y Carla Carmela Corrales (22).

Los investigadores están ahora abocados a la tarea de apresar a una segunda mujer que se encuentra prófuga y también está acusada de ser parte de la misma banda. La mujer que permanece evadida de la justicia es la pareja de Díaz, que sigue preso en Magdalena.

El hecho

Sobre la estafa se indicó que el Contador azuleño realizó una transferencia de más de 1 millón de pesos a un supuesto amigo que le ofreció venderle dólares. La víctima, que tiene 66 años, tomó cuenta de que había sido engañado luego de la operación bancaria que se concretó a finales de enero.

Lo que se probó después es que el Contador cayó en la estafa dado que el teléfono de su amigo había sido hackeado y puesto a disposición de las maniobras delictivas.

Sobre la investigación los mismos voceros que hablaron con En Línea Noticias indicaron que la dos mujeres involucradas eran poseedoras de cuentas bancarias a su nombre. A esas cuentas bancarias llegaba el dinero que robaban mediante las estafas virtuales que, se cree, podría tener aún más víctimas.

Antecedentes

En Línea Noticias supo que a finales del mes de enero pasado ya se habían realizado allanamientos en Alejandro Korn, precisamente en un domicilio donde vivía la pareja del preso que ahora está prófuga.

El allanamiento de enero hizo posible el secuestro de teléfonos celulares que, una vez en poder de los investigadores, fueron sometidos a distintas pericias.