Caravana, motosierras y palas: Javier Milei estuvo en Olavarría

El candidato a presidente de la Libertad Avanza, Javier Milei llegó a Olavarría en una visita que no duró más de 45 minutos y sólo estuvo en centrada en lo gestual: no hubo discursos ni diálogo con los medios.

El libertario llegó a la ciudad secundado por su hermana, Karina y la candidata a gobernadora, Carolina Píparo.

Desde el mediodía un nutrido grupo de seguidores, en su mayoría jóvenes y adolescentes, se apostaron en la intersección de Vicente López y San Martín. Allí también estaba Celeste Arouxet, candidata a Intendenta de la Libertad Avanza en Olavarría.

Milei arribó a la ciudad en avión y se trasladó en camioneta desde el Aeropuerto hasta el centro de la ciudad. El candidato a presidente se sumó a su militantes por calle San Martín y desde allí se inició la caravana.

Si bien se había anunciado una caravana de cuatro cuadras, todo fue más corto y solo fueron dos.

Milei subido a la caja de una camioneta comenzó a recibir los cánticos de apoyo y marchó desde San Martín y Vicente López y Dorrego. Allí, de manera sorpresiva, bajó de la caja y se subió a la camioneta que lo había traído a Olavarría.

Durante el desarrollo de la caravana no faltaron ninguno de los símbolos que Milei ha planteado en esta campaña presidencial: motosierras y palas fueron parte del paisaje. «La Casta tiene miedo», fue la música de fondo que irrumpió en el mediodía olavarriense y sirvió de telón de fondo durante la brevísima actividad.

Además el candidato a presidente firmó autógrafos en cualquier cosa que le acercaran: hubo billetes de 1000 pesos y hasta un perro.

Pese a lo fugaz de la visita, Celeste Arouxet no se despegó de su candidato a presidente. Desde su entorno aseguraban que era muy importante está visita dado que la candidata local ganaría mayor visibilidad junto a quien fue el candidato más votado en las PASO.

La Policía de la Provincia de Buenos Aires había montado un fuerte operativo policial alrededor del candidato a presidente y además hubo custodia privada.

Según se dejó saber, en la previa del acto, se esperaban alrededor de 200 personas por lo que se había pensado realizar una caravana a pie. El número de asistentes fue mayor y los planes cambiaron.