Una iniciativa contempla la creación de otra sala para la Cámara Penal de Azul
El proyecto tiene que ser aprobado en la legislatura provincial. Surgió como consecuencia de la cantidad de sumarios tramitados el año pasado ante el máximo tribunal de alzada departamental.
Fuente: Diario El Tiempo
Un proyecto de ley enviado a la legislatura desde la Suprema Corte propone crear, modificar y disolver diferentes órganos existentes en los departamentos judiciales de la provincia de Buenos Aires.
La iniciativa, surgida de un informe confeccionado desde la Secretaría de Planificación del máximo tribunal bonaerense, en lo que tiene que ver específicamente con el Departamento Judicial Azul contempla crear una nueva sala en la Cámara Penal y transformar un Juzgado de Garantías en uno Correccional.
Con relación al máximo tribunal de alzada departamental, entre otros aspectos, fundamentalmente se tuvo en cuenta el cúmulo de causas que se tramita a través de la única sala que posee la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal con sede en el tercer piso del Palacio de Justicia local. Y esa misma cuestión se valoró como referencia al aludir a lo que sucede en materia de sustanciación de sumarios en los dos juzgados correccionales que funcionan en Azul y el que está en Tandil, sin que se haya hecho mención al juzgado que tiene asiento en Olavarría y también depende del Departamento Judicial Azul.
En ese informe de la Secretaría de Planificación que se tradujo en el proyecto confeccionado desde la Suprema Corte, además del análisis de la cantidad de causas que se tramitan, se tuvieron en cuenta otros factores para darle forma a ese diagnóstico que concluye que hay que crear en los Tribunales bonaerenses nuevos organismos, reconvertir algunos y suprimir otros.
En ese sentido, se hizo mención a la “carga de trabajo”, “las proyecciones respecto de la población y otros indicadores vinculados a la actividad judicial”. También, a “la modificación del mapa judicial producida por la sanción de sucesivas leyes”.
Además se señala que, en algunos casos, “las creaciones solicitadas deben ir acompañadas con el crecimiento de la infraestructura edilicia, a fin de evitar la superpoblación de los edificios existentes y la dispersión urbana de los adquiridos y/o alquilados”.
Desde la Suprema Corte, el proyecto fue remitido días atrás a las cámaras de Senadores y Diputados de la Provincia, incluyendo no sólo esos aspectos mencionados con relación a Azul, sino también otros que hacen referencia a las realidades de los demás departamentos judiciales del territorio bonaerense.
El pasado 10 de julio el máximo tribunal de la Provincia, presidido en la actualidad por Eduardo de Lázzari, propició ante los Poderes Ejecutivo y Legislativo el dictado de una llamada “Ley de Creación, transformación, descentralización y disolución de órganos jurisdiccionales”.
Lo hizo acompañando dicha iniciativa con un anexo donde se mencionan esos cambios que se proyectan. Modificaciones todas surgidas sobre ese informe de situación confeccionado desde la Secretaría de Planificación de la Corte bonaerense, en el marco de un estudio estadístico tendiente a evidenciar las necesidades existentes en territorio provincial con relación a la -según se menciona- “creación, transformación y eventual disolución de órganos jurisdiccionales”.
Además de informar sobre esa situación al Ejecutivo y al Legislativo de la Provincia de Buenos Aires, desde la Suprema Corte se hizo lo mismo con quienes integran la llamada Comisión Permanente de Mapa Judicial, un sector desde donde habitualmente se aborda este tipo de problemática tendiente a mejorar el servicio de justicia.
El proyecto a partir del cual la Suprema Corte solicita la creación de nuevos órganos, la conversión de algunos y la disolución de otros surgió de las conclusiones de ese informe que se hizo desde la Secretaría de Planificación que depende del máximo tribunal bonaerense.
Específicamente relacionado a lo que tiene que ver con el fuero penal, el cúmulo de causas que se tramitan anualmente en cada uno de los departamentos judiciales se convirtió en el factor para solicitar la creación de nuevos organismos, reconvertir a algunos y disolver otros.
Contando con datos remitidos desde cada uno de los organismos penales, los cuales después fueron cotejados a través de la Secretaría de Planificación, la denominada “litigiosidad” existente en cada departamento judicial fue uno de los parámetros que se tuvo en cuenta para darle forma a esta iniciativa.
Con estadísticas que datan del año pasado, en el proyecto enviado a los demás poderes del Estado provincial se propone en los diferentes departamentos judiciales bonaerenses la creación de tres Juzgados en lo Contencioso Administrativo, nueve de Familia, tres de Garantías y uno de Ejecución Penal. También, dos salas de Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal -una de las cuales es para el Departamento Judicial Azul- y “la transformación y/o traslado de ocho Juzgados creados por ley, pendientes de funcionamiento”.
“Por otra parte -se menciona también en la iniciativa-, con el objeto de incrementar la eficiencia en la utilización de los recursos que actualmente posee la jurisdicción Administración de Justicia, se propone la transformación de un Juzgado de Garantías del Departamento Judicial Azul (en uno Correccional), un Juzgado en lo Correccional de Morón y un Juzgado de Responsabilidad Penal Juvenil de La Plata, actualmente en funcionamiento, al momento en que se produzca una vacante de Magistrado, permitiendo la reutilización del espacio físico y la reasignación del personal”.
“Asimismo, al momento en que se produzca una vacante de Magistrado, se propone el traslado de un Juzgado de Familia de San Isidro a la sede Pilar del mismo Departamento Judicial y un Juzgado de Garantías de San Martín a la sede Malvinas Argentinas”, se indica en otro tramo del proyecto.
Además, con el fin de “adoptar medidas conducentes para racionalizar el uso de los recursos en diferentes jurisdicciones de la provincia”, la iniciativa contempla “la disolución -al momento en que queden vacantes- de un Juzgado de Garantías, cuatro Tribunales en lo Criminal, dos Juzgados en lo Correccional, un Juzgado de Garantías del Joven, seis Juzgados de Responsabilidad Penal Juvenil, doce Juzgados en lo Civil y Comercial, una sala de Cámara de Apelación en lo Civil y Comercial y un Juzgado de Familia”.
En todo ese contexto mencionado de lo que actualmente es la realidad judicial de la provincia de Buenos Aires, surgen la creación de una nueva sala para la Cámara Penal que funciona en los Tribunales de Azul y la conversión de un Juzgado de Garantías en uno Correccional.
Con relación a la nueva sala para la Cámara, la situación está específicamente mencionada en el Artículo 1° de este proyecto, para que se convierta en ley, que fuera remitido recientemente a la Legislatura desde la Suprema Corte.
En tanto, en el Artículo 7° de la misma iniciativa se ordena la transformación, “al momento en que se produzca la vacante de alguno de sus magistrados” -para el caso del Departamento Judicial Azul- de “un (1) Juzgado de Garantías en Juzgado en lo Correccional en la cabecera departamental”.
Lo que dicen los números
A favor de lo que sucede con la cantidad de causas que se tramitan ante la Cámara Penal del Departamento Judicial Azul, que interviene en segunda instancia en sumarios surgidos de ese total de once ciudades del centro de la provincia de Buenos Aires que dependen de su jurisdicción, el informe confeccionado desde la Secretaría de Planificación de la Corte señala que el máximo tribunal de alzada no ostenta “un índice de congestionamiento elevado” con relación a la tramitación de dichos expedientes.
Esa misma situación fue evidenciada a través de estadísticas surgidas del Departamento Judicial La Matanza, donde -al igual que en Azul- surge como necesaria la creación de otra sala para la Cámara Penal.
Para confeccionar ese informe que después diera lugar al proyecto presentado por la Suprema Corte, en ambos casos se tuvieron en cuenta cifras que datan de lo sucedido durante el transcurso del año pasado.
En ese entonces, cuando en la única sala que tiene la Cámara Penal en Azul sólo estaba el juez Damián Cini, se mencionó que ingresaron al tribunal de alzada local más de 1.400 causas.
Eso convirtió a Azul en uno de los departamentos judiciales donde mayor ingreso de sumarios penales por sala se registraba. Algo que también podía observarse en las Cámaras con asiento en Dolores, La Matanza y Lomas de Zamora.
No resulta un dato menor el referido en el párrafo anterior. Sobre todo si se toma en cuenta que las realidades de otros departamentos judiciales, por cantidad de habitantes y problemática delictiva, suelen ser mucho más críticas si se las compara con lo que sucede en Azul; que así y todo ya evidenciaba un elevado ingreso de causas a la Cámara Penal por el que ahora -según se concluye desde la Corte- es necesaria la creación de otra sala.
Esas estadísticas también indicaban que durante el año que pasó ingresaron en todas las Cámaras Penales de la Provincia 35.367 expedientes, lo que evidenciaba un incremento de un 5% con relación a lo que había sucedido en 2.017.
Además, en promedio, ingresaban 982 sumarios penales a cada una de las salas de los tribunales de alzada pertenecientes a los 19 departamentos judiciales existentes en la actualidad en territorio bonaerense.
Volviendo a las Cámaras Penales con asiento en Azul, La Matanza, Dolores y Lomas de Zamora, ese elevado ingreso de causas -según el informe surgido en la Corte- sólo hace necesario la creación de nuevas salas en los dos primeros departamentos judiciales referidos.
Dicho diagnóstico obedece a que en Dolores ya fue creada una sala más durante el año pasado -que aún no está funcionando- y que, al estar prevista la puesta en marcha del Departamento Judicial Avellaneda Lanús, eso servirá para absorber parte de la competencia que en la actualidad tienen las tres salas que conforman la Cámara Penal de Lomas de Zamora.
Con relación a los juzgados correccionales, la necesidad de convertir en el ámbito del Departamento Judicial Azul en uno de esos organismos a un Juzgado de Garantías va de la mano también de la cantidad de causas que se tramitaron durante el año que pasó.
Al respecto, el informe elaborado desde la Secretaría de Planificación de la Corte indicaba que en 2.018, en todos los juzgados correccionales de la provincia, se habían elevado a juicio 27.491 causas. Un 11,2 % más que el año anterior.
En promedio, se contabilizaron 372 causas por organismo y fueron en los juzgados correccionales que tienen sedes en los departamentos judiciales de Azul, La Plata, Mercedes, Necochea y Pergamino donde más causas ingresaron, superando en todos esos casos a los 500 expedientes.
Además, si se tenían en cuenta las causas totales iniciadas durante el año pasado en esos juzgados -incluyendo, según se menciona en el informe, “Querellas, Apelaciones contravencionales, Faltas, Amparos, Oficios y exhortos”- la cifra ascendía a 35.840 expedientes. En promedio, eso implicaba un total de 484 sumarios por cada uno de esos órganos que funcionan en los departamentos judiciales bonaerenses.
En ese contexto, donde más congestión de causas se evidenciaba era en los juzgados correccionales con asiento en Azul y Tandil (ambos pertenecientes al Departamento Judicial local), La Plata, Mar del Plata, Mercedes y Necochea. En todos esos organismos se superaban las 600 causas.
Ante esa realidad, la Suprema Corte también considera conveniente en ese proyecto recientemente remitido a la legislatura bonaerense crear más juzgados correccionales en los departamentos judiciales de Azul y La Plata. Con la salvedad de que, el que se cree en Azul si este proyecto de ley se aprueba, surgirá de la reconversión de un Juzgado de Garantías a uno Correccional.
Las creaciones de estos nuevos organismos en el ámbito del Departamento Judicial Azul no sucederán, obviamente, en lo inmediato.
Para que eso ocurra, primero habrá que convertir en ley ese proyecto enviado desde la Suprema Corte a la legislatura provincial. Y una vez que eso pase, será necesaria la voluntad política de quienes estén en el poder para que esta iniciativa definitivamente se haga realidad.
Algo que tampoco sucederá en lo inmediato, más allá de esas cifras que señalan que las creaciones de todos estos nuevos organismos judiciales, las reconversiones de algunos más y las disoluciones de otros ya surgen como necesarias.
A diferencia de lo que sucede en otros departamentos judiciales de la Provincia de Buenos Aires, la Cámara Penal de Azul es una de las pocas que todavía sigue contando con una sola sala.
Además, en la actualidad no se ha completado en cuanto a sus integrantes. De hecho, recién en marzo pasado pasó a tener dos miembros, lo cual sucedió cuando juró el magistrado Carlos Pagliere (h).
Hasta ese momento Damián Cini, que ya venía formando parte del máximo tribunal de alzada departamental desde años atrás, era el único de los tres miembros con los que contaba la Cámara Penal.
Eso hacía que, para revisar varias de las causas que en ese entonces se tramitaban en una segunda instancia, Cini tuviera que integrar el Tribunal con jueces de Garantías, penales o correccionales. Una situación ya no se reiteró tanto desde marzo pasado con la mencionada llegada de Pagliere (h) a la sala que está en el tercer piso del Palacio de Justicia de Azul.
Todavía resta designar a un tercer integrante para la Cámara, en medio de un concurso cuya terna el Consejo de la Magistratura todavía no ha confeccionado, pero para el que varios magistrados y funcionarios del Departamento Judicial Azul ya están en condiciones de convertirse en candidatos, teniendo en cuenta que se han presentado a rendir los exámenes correspondientes.
Los comentarios están cerrados.