Brevísima diatriba contra el populismo maldito
Opinión / Carlos Verucchi / En Línea Noticias (Twitter: @carlos_verucchi)
El mensaje me llega a través de un grupo de Whatsapp. Es ingenuo, el comentario proviene de alguien sin mala intención, totalmente inocente.
“Che, dicen que los que pidan el subsidio de luz y gas no van a poder comprar dólares por el banco. ¿Será cierto?”
Las reacciones no se demoran, “Qué barbaridad… ¡Esto no puede ser…! No tienen vergüenza… ¿Hasta dónde vamos a llegar?”
La indignación gana los comentarios del grupo durante todo el día: “¿Cómo se les ocurre? Este gobierno es el peor de la historia”. “Que se vayan”. “No vuelven nunca más.”
Veamos… Si no entiendo mal, la lógica que utilizan los indignados sería: el Estado me tiene que pagar parte del consumo de gas y de energía eléctrica para que yo pueda ahorrar en dólares y ponerlos debajo del colchón, improductivamente, o gastarlos en Florianópolis el verano que viene.
“Macanudo”, diría mi abuela.
O, “mirá qué rana”, (versión más moderna de mi viejo).
El anti populismo llega hasta ahí nomás, si golpea a la puerta de mi casa hago como que no estoy.
Obviamente, los indignados son los mismos que llevan años indignándose por los peyorativamente denominados “planeros”.
Esta columna va a ser breve, muy breve, la más breve de todos estos años. Hay circunstancias que nos dejan sin palabras. No necesitan argumentos. Resulta innecesario agregar cualquier otra cosa. Queda todo dicho por sí solo. Absolutamente nada más.
Nada.
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