Tres ciudades “estafadas” como alguna vez pasó en Olavarría: ¿Quién es Pedro Enríquez?

Uso un mismo verso y “estafó a vecinos” de por lo menos tres municipios. ¿Cuál fue el caso similar en Olavarría?


Un hombre que se hacía llamar Pedro Enríquez y un menor de edad -presumiblemente, su hijo- estafaron a las comunidades de Pigüé y Pergamino con un curioso “cuento del tío” que apelaba a la solidaridad de los vecinos.

El truco fue detectado por un pigüense -cuya identidad no trascendió-, a inicios de esta semana.

“Sole, ¿cómo estás? -le escribió a una amiga de Pergamino-. Te mando la foto de este mentiroso. Pasó por Pigüé, donde yo vivo, el 9 de enero. Acá la gente se movió y le compraron dos pasajes a Santa Fe de 1.400 pesos a cada uno. Les dieron comida y ropa nueva. Alguien se enteró de que en Pergamino hizo lo mismo”.

 

Según se pudo reconstruir a partir de varios relatos, el modus operandi de Enríquez y su supuesto hijo fue el mismo en ambas ciudades, aunque con “cuentos” distintos.

 

Cometió un grave error: en todos lados se presentó como Pedro Enríquez. Por eso sólo hubo que googlear su nombre para averiguar que ese peculiar delincuente, que hace unos días se aprovechó de la solidaridad de los vecinos de Pigüé y Pergamino, ya venía estafando comunidades desde 2013 con el mismo “cuento del tío”.

 

El primer antecedente se remonta a julio de ese año. Como hizo el 9 de este mes en Pigüé, y cinco días después en Pergamino, Enríquez recaló en Viedma con dos supuestos hijos y apeló a la solidaridad de la comunidad para conseguir no sólo un lugar para dormir, sino también ropa, comida y un poco de dinero para seguir viaje hasta su presunto destino final, Trelew.

 

El otro registro que se encontró sobre Enríquez es más fresco: de julio de 2016. La localidad elegida fue San Pedro. El verso cambió un poco: muerto de frío, se presentó junto a dos niños a los que llamó hijos y pidió ayuda para llegar hasta San Miguel de Tucumán, donde su familia lo esperaba “con nervios y ansias”. Su lugar de procedencia -señaló- era Trelew, donde residió mientras trabajaba para Tecno Construcciones, una de las firmas de Lázaro Báez.

 

Durante tres días durmieron en la terminal de ómnibus, donde -aseguró- los había dejado un camionero que nunca cumplió su promesa de volver a buscarlos para seguir viaje.

 

Luego los vio un policía que los llevó a una radio para que contara su historia. Allí hizo el cuento con lujo de detalles -incluyó la muerte de una hija en un incendio y otras penurias, una más dolorosa que otra-, y la solidaridad de la gente hizo el resto. Incluso un comerciante local, dueño de un hotel, le pagó los pasajes a él y a sus hijos, contó el portal de noticias visionregional.com.ar

 

El 9 volvió a hacer lo mismo en Pigüé y, cinco días después, en Pergamino.

 

Siempre con el mismo nombre, lo que sirvió para que un pigüense sospechara y finalmente desenmascarara al estafador. Quizá haya sido la última actuación de Pedro Enríquez.

 

¿Y el caso Olavarría?

El 21 de agosto de 2016 aparecía en el Diario El Popular de Olavarría una entrevista a Ricardo Ruíz. Éste había llegado a Olavarría “a dedo” después de haber sido despedido de una empresa – que al igual que Enríquez – comandaba Lazaro Baez.

 

Pero la historia de Ruiz se derrumbó en diciembre de 2016.

 

El 16 de diciembre de aquel año un grupo de trabajadores de la cantera GALASUR se presentaron ante la Fiscal Paula Serrano para denunciar a Ricardo Ruiz, un supuesto ex empleado de Lazaro Baez que llegó a Olavarría pidiendo ayuda luego de que el empresario – hoy detenido – cerrará Austral Construcciones y él se quedará sin trabajo.

 

Tras realizar la denuncia indicaron que este viernes debía llegar mercadería – sobre todo productos electrónicos – que Ricardo Ruiz gestionaba en el sur y sus compañeros de Olavarría compraban. Ese camión y esos productos no llegaron a Olavarría y a Ruiz no se lo encuentra desde este jueves.

Ricardo Ruiz – Foto El Popular.

En declaraciones a los medios indicó: “Estamos denunciando a Ricardo Ruiz, quien vino a Olavarría en búsqueda de trabajo, su cuento fue que era despedido de Austral Construcciones y quedó varado en la Terminal. En ese momento se acerca mucha gente de la ciudad a darle una mano.”

 

En aquel entonces los denunciantes indicaban que “los conocidos le dieron una mano para que empiece a trabajar en GALASUR. No empieza a contar las cosas que hace en el Sur. Que era conocido de gente que trabaja en las empresas de electrodomésticos, y que tenía la posibilidad de conseguir cosas a bajo precio.”

 

Los denunciantes indicaron que “primero llegaron algunas cosas a bajo costo. Todos le dieron plata, ofreció a mucha gente. Aparentemente estamos descubriendo que lo hizo con gente de la ciudad, incluso de la Municipalidad. Te hacía un recibo, con una firma.”

 

 

Con datos de La Nueva.Com

Los comentarios están cerrados.