Ataque al playero: existen “pruebas contundentes” contra el aprehendido
El playero victima tiene 25 años. Consideran que el hecho está esclarecido. Fuertes repercusiones políticas y sindicales tras el ataque.
Para los investigadores el ataque al playero de la estación de servicio Shell está esclarecido y además dicen que existen «pruebas contundentes» contra el presunto atacante que está aprehendido.
Como se informó el sábado cerca de las 10 horas un solitario delincuente llegó hasta la estación de servicio ubicada en la intersección de ruta nacional 226 y calle Rivadavia. Con intención de robo se acercó a un playero y allí lo apuntó con un arma. Tras esta maniobra se produjo un forcejeo entre atacante y víctima que derivó en un disparo de arma de fuego que impactó en el abdomen de la víctima.
Voceros oficiales identificaron al playero como Danilo Jara Preisegger.
Primero una ambulancia se acercó al lugar y trasladó al herido al Hospital Municipal donde fue intervenido quirúrgicamente y de manera paralela se montó un imponente despliegue policial en los alrededores de la estación de servicio para dar con el delincuente y con el arma que usó para el ataque.
Tras el hecho el atacante fue aprehendido y puesto a disposición de la justicia. Tras los primeras tareas investigativas se confirmó que, «está todo registrado con las cámaras de la estación de servicio y existen pruebas contundentes para que quede detenido».
Esto último dependerá de la justicia aunque hay confianza entre los investigadores.
Sobre el ataque explicaron que «el delincuente no alcanzó a robar nada» y explicaron «al mostrar la pistola y ponerla al costado de su abdomen, el playero intenta defenderse y ahí dispara el agresor quien después sale corriendo».
Es importante recordar que tras las primeras pesquisas de la Policía Científica se logró encontrar al menos «un casquillo» de pistola 9mm que se correspondería al arma que disparó el delincuente para reducir a su víctima.
Posteriormente la policía avanzó en un rastrillaje por la zona con el objetivo de encontrar la pistola que, en la huida, fue abandonada por el delincuente.
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